sábado, 12 de diciembre de 2009

Los talentosos también se retiran

Por Lucio

El retiro es probablemente el momento más crítico para un deportista, ya que implica el nacimiento de una nueva etapa totalmente distinta. Varios factores psicológicos juegan un papel preponderante, tanto en la decisión misma como en la forma de encarar la vida posteriormente.

Si hablamos particularmente del tenis, la situación es compleja: un deporte individual, exigente en su calendario de actividad, generador de un agotamiento físico y mental, y que conlleva un profesionalismo riguroso. Quienes logran llegar a un alto nivel, deben soportar la presión a la que están sometidos, muchas veces aislados de su familia y amistades, viajando de un punto a otro del mundo.

Justamente, tres destacados tenistas han decidido en estos últimos días del 2009 tomar esta decisión. Marat Safin, Fabrice Santoro y Amélie Mauresmo dejaran un espacio vacante de talento en los circuitos de la ATP y la WTA respectivamente.

En octubre de 2008, Marat Safin perdió en la primera ronda del Masters Series de Paris ante Juan Mónaco. Los malos resultados y algunas lesiones despertaron en el ruso la idea de abandonar la actividad. Luego de esa derrota mencionada, Marat declaró que "necesito disfrutar de mi vida fuera del tenis, y ver si continuo. Los últimos tres años han sido muy intensos, ahora no tengo presión, nada que demostrar ni probar".

No obstante, el virtuoso ex número 1 se propuso un año más de acción en el ATP World Tour. Los resultados no mejoraron y la derrota ante Juan Martín Del Potro en el Masters 1000 de Paris fue el punto final para su fructuosa trayectoria. Pero cierto aire de redención cubrió al moscovita, que así declaraba luego de perder ante el tandilense: “Ahora ya no tengo horarios, agenda, prácticas, nada. Pertenezco a mí mismo. Tengo toda la libertad para mí.”

A los 29 años se despedía quien fue uno de los mejores representantes de su país. Dos títulos de Grand Slam (US Open 2000 y Abierto de Australia 2005), 5 torneos de Serie Masters y estandarte en la conquista de las dos Copa Davis que posee Rusia (2002 y 2006). Un palmarés más que elogiable para este jugador que también sobresalió por sus excentricidades y su volátil carácter dentro y fuera de las canchas.

Pero más allá de cuantas raquetas haya roto o que improperios haya lanzado hacia algún que otro juez de silla, nadie podrá negar la capacidad técnica que ha desplegado Safin durante sus 10 años de carrera. Un gran drive, un mejor revés, un poderoso saque, potencia física, versatilidad para el juego de fondo y en la red. En fin, un tenista completo que ha decidido alejarse de la competencia.

Por suerte lo podremos ver en la Argentina, jugando relajado en la Copa Peugeot, un torneo de exhibición que se disputará en el Buenos Aires Lawn Tennis Club, y donde compartirá escenario con David Nalbandian, Juan Mónaco, Carlos Moyá, Fernando González y Marcos Baghdatis. Seguramente el público local le concederá una merecida ovación.

Otro de los que ha colgado la raqueta es Fabrice Santoro. El francés se despidió en Paris, al igual que Safin, en un partido donde cayó con el estadounidense James Blake. En este caso, el retiro de Santoro era algo previsible. Sus 36 años eran algo poco frecuente en jugadores profesionales.

Sin embargo, si hay una característica que califica a este jugador es la de “distinto”. Su físico no corresponde a los preceptos de este deporte y su forma de jugar es, para los especialistas, poco ortodoxa. Su drive o derecha la realiza con las dos manos empuñando el grip, algo normal para realizar el golpe de revés, pero casi inaudito para el golpe mencionado. Santoro es un espectáculo aparte por su despliegue, no físico sino técnico. Su apodo de Mago se lo gano por ese toque de distinción que siempre tuvo.

Fabrice no ha tenido grandes resultados en singles. En esta rama consiguió 6 títulos, pero sus mayores logros estuvieron en el dobles, consiguiendo el Australian Open en 2003 y 2004, y la Masters Cup de Shanghai en 2005, con su compatriota Michael Llodra como compañero. Igualmente él ha dejado claro cuál es su parecer sobre los objetivos de su larga carrera: “Estamos en la cancha para dar espectáculo, la gente paga para ver show. No me importa si gano o pierdo.” De esta manera, en una entrevista de hace un par de meses, el nacido en Tahití daba su lirica impresión sobre su profesión, la cual ha abandonado recientemente.

El circuito femenino de la WTA también ha tenido el adiós de una de sus mejores exponentes. Amélie Mauresmo confirmó inesperadamente que se aleja de la competencia. La francesa de 30 años explicó en una conferencia de prensa, que brindó en su país, que tomó esta decisión por un agotamiento mental. Básicamente no tenía ganas siquiera de ir a entrenar.

Otra prolífica exponente de los courts que deja un gran lugar vacante. Su revés a una mano derrochaba estética, además de otros aspectos de su juego potente y agresivo. Ese juego que le permitió ganar 25 títulos en singles, de los cuales el Australian Open y Wimbledon, ambos obtenidos en 2006, fueron los más relevantes. La nacida en Saint-Germain-en-Laye también consiguió la Copa Federación (versión femenina de la Copa Davis) en 2003 y ocupo el lugar de privilegio del ranking durante varios meses.

Son tres casos diferentes, pero que de alguna manera u otra decretan el final de carreras y talentos elogiables en el tenis de alto nivel. Para ellos el reconocimiento de quienes disfrutamos de este deporte cuando es concebido con calidad y pasión.

Bienvenidos

Por Luis


Queridos lectores, bienvenidos una vez más a este espacio virtual que con entusiasmo, ganas y esfuerzos trataremos de actualizarlo de la manera más seguida posible.

Quiénes somos ya lo dijimos en el primer posteo, pero no está mal refrescarlo. Originariamente fuimos 3 los que tuvimos la idea de crear este blog periodístico. Hoy ya somos 7. Gracias a eso ahora podemos abarcar más esferas y más temas de lo que anda pasando en estos días. Les damos la bienvenida a Alfredo y a Emiliano, quienes se ocuparán del fútbol de primera división, tanto nacional como internacional, a Gabriel, quien analizará el apasionante mundo del ascenso, a Lucio, que seguirá el tenis, a Federico, quien escribirá lo que anda pasando en el resto de los deportes, y a Gerardo, quien se encargará de redactar lo concerniente a lo que no es meramente deportivo.

Con respecto al nombre del blog, ¿por qué “Picando al vacío”? En este intento de picar al vacío, de encontrar un hueco y aprovecharlo, trataremos de abordar los temas con un ingenio distinto, con intención de ser originales desde el enfoque hasta el tratamiento. Como “futuros periodistas deportivos” seguramente nos centralizaremos en el deporte, pero eso no quita que no hagamos artículos sobre lo que esté pasando en el país que no este vinculado al fútbol, tenis, básquet, etc.

Resulta raro, quizás, que a fin de año se re-abra un espacio, pero considerando que son tiempos de balances, de análisis de lo que se hizo bien y mal, de lo que terminó o comienza a emerger o a confirmar, de lo que puede llegar a pasar el año que viene, etc., no suena tan descabellado esta reapertura. Seguramente nos abocaremos a eso hasta que termine el año, para el año que viene empezar con el seguimiento de lo que acompañará a la actualidad de turno.

Sin más, los invitamos a que recorran este blog de noticias, investigaciones, editoriales, reportajes, crónicas y notas de color, entre otros géneros periodísticos.

Por último, hoy el periodismo independiente carece paradójicamente de independencia. Los medios se acoplan por intereses económicos al mejor postor, adoptando puntos de vista unilaterales, eliminando, además, la objetividad (tronco conceptual del periodismo). Tratan de mostrar la verdad que pasa por sus focos como si fuera la única que vale, pero se olvidan que, como dijo Nietzche, “ante los hechos no hay una verdad, sino, distintas interpretaciones”. Y ésta es una de ellas.

viernes, 18 de septiembre de 2009

Una historia entre muñecas y medallas

Entrevista a Romina Plataroti, la gimnasta con mayor reconocimiento del país.

Por Luis

A los 5 años y meses de vida, una niña de caballito llamada Romina Plataroti, en su paseo por el club Ferro carril Oeste, se cruzó con lo que luego le iba a dar innumerables satisfacciones. Quiso el destino que sus ojos, en su mirada panorámica de las cosas que tenia alrededor mientras esperaba que su padre terminara de jugar al tenis, se fijaran en la puerta de una escuelita de gimnasia. Con la compañía de su hermana entró para probar sus gustos que luego le indicaron lo que tenia que hacer. Al poco tiempo vino la aceptación de la profesora y la inclusión en el equipo. Y así empezó a escribir su historia.

¿A esa edad se suele comenzar?
A esa edad, y hasta más chicos todavía

¿Qué tiene de bueno y de malo empezar una actividad de alto rendimiento a tan temprana edad?
Es una actividad bastante contradictoria con ese tema, porque cuando uno hace un deporte de alto rendimiento requiere muchas horas de entrenamiento, exigencia y presiones. Y cuando uno es chico quizás no está tan preparado para poder manejarlas. Le cuesta a un adulto, imaginate a un chico o a un adolescente. Hay que tener una buena contención familiar por sobre toda las cosas. Vas aprendiendo en el camino.

¿Cómo fue repartir tu tiempo entre el estudio y la gimnasia?
En los años de primaria me pasaba que viajaba y estaba siempre al límite de las faltas y quedarme libre. En el secundario estudie en el instituto de River Plate que tiene una orientación deportiva. Lo bueno era que además de entrenar en el club, me eximían en educación física. El tema es que cuando volvía de algún viaje tenía que rendir una prueba y no tenia ni idea que habían visto.

¿Pudiste terminar bien el colegio o repetiste algún año?
No perdí ningún año. Hice 2 años en River y 3 años en Metascole, donde concurrían muchos tenistas por ejemplo. Estaba bien preparado para deportistas de alto rendimiento, éramos poquitos en las comisiones y si viajabas, cuando volvías, tenias a tu profesor que te ponía al tanto de lo que se veía. Estaba adaptado a las necesidades del deportista

En el periodo de crecimiento el ser humano va quemando etapas que necesitan cerrarse para abrir otras. Así es que primero el bebe debe gatear para luego caminar. No solo en eso se puede encontrar una ejemplificación, sino en diversos momentos de la vida. Al respecto Romina dice: “Había una diferencia con mis compañeras de colegio. No salía tanto porque tenía que competir o viajar. Era un estilo de vida diferente. Había cosas que no las hacía o no las hacía tanto, eso de quedarse después del colegio, ir a la casa de una amiga, un amigo. O el hecho de salir más. Para mi era natural .Después me retiré e hice ciertas cosas que no había vivido, o había vivido en cierta cantidad”

Hablando de quemar etapas, la celebración de los quince años en una mujer es uno de los momentos más importantes y esperados. ¿Los pudiste festejar?
Los festejé después porque los cumplí estando afuera. Hice algo tranquilo. A veces no estaba para los quince de mis amigas. Son las cosas que uno se pierde en cierta manera. Después intenté hacer todo lo que podía dentro de las posibilidades de mi actividad, como ir al viaje de egresados, que me parece que es positivo para poder también tener otros vínculos u otros espacios en donde poder moverse. Aunque si bien uno está enfocado en la actividad, son ciertos respiros, y ayudan al desarrollo de una persona en general

Termina el deporte pero sigue la vida…
Y si, el retiro es todo un tema sino.

¿Como manejaste eso?
El retiro fue elección mía. Como te contaba fui de viaje de egresados a Bariloche en el 94, me quería retirar ese año o apostar al año siguiente porque se hacia el Panamericano en el país y era un lindo torneo para retirarse. Así fue que me entrené hasta el Panamericano de Mar del Plata en marzo, y me retiré.
Si bien fue cuestión propia, cuesta bastante, no por el hecho de que quisiera volver a hacer gimnasia, nunca me pasó eso de “Uh me hubiera quedado, o no”. Cuesta mucho el cambio de estilo de vida, el tener otro rol. Se juntó también un poco el tema de que uno empieza a estudiar, insertarse en un ámbito profesional, en donde uno no está acostumbrado a manejarse tanto. Eso lleva un trabajo, un proceso de nuevos vínculos de pertenencia…yo pasaba 8 horas dentro de un gimnasio. También desde la parte física. Desde que mi cuerpo estaba acostumbrado a entrenar tantas horas a dejar de entrenar. Y en esa época se podría decir que no había un retiro cuidado en el sentido de que no se trabajaba con el tema del desentrenamiento o que hubiera contención después…uno más o menos hacía lo que podía y sentía. Mi familia me acompaño por suerte. Fue una etapa de acomodar un montón de cuestiones. Más allá de la decisión del retiro, a veces después la transición hay que trabajarla, son etapas de la vida, acostumbrarse a tener roles diferentes, a moverse en ámbitos diferentes.
Era ver otras cosas. Mi interés también era ir al cine o quedarme en casa sin hacer nada, que para otra persona era muy común para mi era algo novedoso o algo que quería hacer. No lo hice por 12 años…

Entre todas sus medallas se destacan las más de 10 ganadas en los torneos iberoamericanos y las 2 de bronce en los juegos Panamericanos de La Habana en 1991 y en Mar del Plata 1994. A esto hay que sumarle que participó en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 y que hay un ejercicio que lleva su nombre:”El ejercicio es en suelo, uno de los aparatos que se hacen con música y acrobacias. Surgió un día en el entrenamiento, yo estaba practicando un salto que ya estaba en el código, y me empezó a salir algo nuevo, lo comenzamos a probar y no estaba registrado. Lo tenés que presentar en un mundial o Juego Olímpico para ver si lo ingresan o no. Lo presenté en el mundial antes de los juegos olímpicos. La asociación consideró que podía ingresar al código y ahí está. Quedó el Plataroti”

¿Que tenías en mente al retirarte?
Me retiré en el 95, ya había terminado el colegio y tenia en mente periodismo y la psicología. Nunca se me dio por hacer un profesorado o ser entrenadora de gimnasia. Me tomé un año sabático y después finalmente empecé a estudiar psicología, no con el objetivo de hacer psicología en el deporte, sino por que me gustaba la psicología en sí. A mitad de carrera decidí especializarme a parte en el deporte. Y fue una manera de unir una parte de mi vida que fue muy importante y mi profesión. Me resulta muy cómodo, me gusta mucho.

¿Qué concepto que hayas tratado en tu carrera lo podés relacionar con algún momento de tu vida deportiva?
Hay un concepto en psicología del deporte que se llama flow, que es fluir. Es un estado óptimo de rendimiento, es muy difícil de explicar porque es muy subjetivo. Es una sensación como que uno se siente en el estado óptimo, muy concentrado, estás en el momento, en el aquí ahora, sin presiones. Recuerdo en dos torneos en donde me sentí muy bien, leia todas las características, y me decía “ay mirá, es muy similar, a eso que yo sentía y no le podía poner un nombre”. Y otras cuestiones como técnicas que las hacia como visualizaciones, eso de imaginarse haciendo la rutina. Las hacia pero nadie me había dicho que eso era una visualización y quizás no lo hacia de forma sistemática, que hubiera sido más efectivo quizás, y uno lo hacía como herramienta propia.

En un reportaje dijiste que en el deporte argentino había improvisación. ¿Sigue estando?
Dependen los deportes. Quizás lo que falta en el país es una política deportiva a largo plazo. En una nota hablaba de eso: hacía referencia en que quizás antes de un juego olímpico viene todo, te ponen todo. Psicólogo, apoyo, pero un año antes o menos, cuando en realidad eso lleva un trabajo a largo plazo y estaría bueno que se comience hacer pero con anterioridad. A eso me refiero, de que haya una planificación. Lo noté en el juego olímpico de Barcelona. En el CeNARD había un equipo de profesionales pero supe que existían 2 meses antes de ir a los juegos. El trabajo puede ser medio de urgencia o emergencia pero es muy difícil armar un vínculo con un profesional, sobre todo en el caso de la psicología. Si vos no estás más tiempo, por dos entrevistas que tengas es muy complicado. Salvo que sea una intervención muy específica, y que uno más o menos conozca de qué se trata. Es por eso que digo que es muy improvisado pero no muy planificado. Quizás hubiera sido bueno que yo viniera estado trabajando con esa profesional u otra desde ya hacia mucho tiempo para que sea más efectivo.

¿Como ves a la gimnasia argentina de hoy?
Lamentablemente no esta pasando un buen momento la gimnasia artística argentina, sobre todo en la rama femenina. Yo creo que hay cambios a nivel social que también uno debe adaptarse e influye. No es lo mismo los quince años de ahora que en mi época o anteriormente. Además, se van volcando a deportes que tienen mayor repercusión. Es medio peligroso por el tema de ganar dinero, quizás la incentivan a hacer cosas para ganar plata pero hay que ver si al chico le gusta. Es difícil sostener algo que no es la motivación propia de uno. A las chicas les encanta la gimnasia, el tema es que es un deporte que exige sacrificios a edades muy tempranas, que es donde hay que tener cuidado y precaución y es por eso que se retiran o no quieren saber nada a determinada edad.

Y así es que sigue escribiendo su historia y ayudando a que otros la comiencen a escribir o la sigan escribiendo gracias a su nuevo rol dado por sus estudios y dedicación. El comienzo, lidiado entre la elección por lo lúdico convencional y el deporte de alto rendimiento fue lo que transversalmente marcó esos 12 años que le dieron más que satisfacciones. Hoy es distinto su rol, su lugar, pero las sensaciones de satisfacción, parecen las mismas.

jueves, 25 de junio de 2009

La luna y el dedo

Los vientos políticos en estos días están dirigidos a lo que serán las elecciones legislativas el 28 del corriente mes. Llueven publicidades, anuncios, discursos y otras formas de hacer campaña en donde se trata de persuadir al otro para que los voten. En ese paisaje se encuentra una discusión que, parece, pasó a segundo lugar en la escala de importancia: la concerniente a la ley de radiodifusión, o mejor dicho, a la ley de servicios de comunicación audiovisual.

En base a los 21 puntos enunciados en esta ley propuesta por el poder ejecutivo, se resalta una gran cantidad de mejoras con respecto a la anterior medida hecha en los tiempos de la dictadura y modificada, en algunos puntos, en la presidencia de Carlos Menem el pasado decenio. A pesar de eso, hay cuestiones que pueden dar letra a las páginas que intente escribir todo aquel que esté en desacuerdo con la ley.

Pensar cuestiones desligadas del campo económico es imposible. La economía marca las pautas a seguir y el lugar desde donde seguirlas. Los grandes grupos (como el grupo Clarín) a cargo del manejo de la información se aprovechan de su posición privilegiada para - gracias a la ausencia de frenos dada por la actual ley de radiodifusión - captar la mayor cantidad de ramales informativos y así monopolizar el contenido. Es por eso que esta ley tiene como punto central ofrecer una apertura de la información a todos los sectores y tal como dijo el reconocido investigador Washington Uranga en un artículo vinculado al tema: “El debate sobre la libertad de expresión no puede quedar reducido solamente a que puedan emitir los que ya tienen espacios garantizados. Otros y otras, sin poder económico pero con ciudadanía plena, tienen que decir también lo suyo. La comunicación es parte esencial de la democracia moderna”.

La contracara de esta norma es que ahora se podrán tener 10 licencias de servicios abiertos, contra las 24 que antes una sola persona podía tener. Queda la preocupación de que sea transgredida la libertad de prensa ya que esta medida como dice la Asociación Internacional de Radiodifusión (AIR) “cuenta con varios aspectos que comprometen la libertad de expresión, al dejar supeditados al arbitrio del poder de turno aspectos claves de la independencia y sustentabilidad de los medios de radiodifusión”. Esto se cree que no ocurrirá si las determinaciones de los permisos estén a cargo de organismos autárquicos alejados de la capacidad de presión de los gobernantes de turno.

Un filósofo chino del siglo V a.c. llamado Confucio dijo alguna vez: "cuando el sabio señala la luna, el necio mira el dedo". Esta ley es un intento por abrir un camino cerrado para pocos, un intento por seguir borrando y cambiando cuestiones plantadas en la dictadura. Aun así, el mirar mas allá del velo puede dejar ver cuestiones que puedan hacer tambalear este proyecto. Es el deseo de todos los argentinos que esto no suceda y que lo que se diga y haga sea hecho con la transparencia que la democracia se merece.